El ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha dicho hoy que el hecho de que la infanta Cristina esté sentada en el banquillo en el juicio del caso Nóos demuestra que “todos somos iguales ante la ley” y que la justicia funciona con normalidad.
En una rueda de prensa celebrada en la sede ministerial y preguntado por esta circunstancia, Rafael Catalá ha destacado que es un reflejo de que “en España funcionan con normalidad las instituciones y el sistema judicial y que todos somos iguales ante la ley y estamos sometidos a los tribunales”.
Rafael Catalá ha dicho que hay que respetar la decisión judicial de juzgar a las personas que se encuentran en este procedimiento en base a unas calificaciones jurídicas.