El comisario europeo de Política Regional, Johannes Hahn, pidió hoy a los Estados miembros y al Parlamento Europeo (PE) que superen sus diferencias sobre la reforma de la política de cohesión con vistas a alcanzar un acuerdo el próximo miércoles.
“Hay una urgencia real ahora de llegar a un acuerdo y encontrar un compromiso razonable; cada institución -los Estados miembros, el Parlamento y nosotros en la Comisión (Europea, CE) tenemos el deber de avanzar a fin de alcanzar un consenso”, señaló Hahn durante el Consejo de Asuntos Generales que hoy aborda este asunto.
Un pacto sobre los planes para reformar la política de cohesión y para crear unas normas comunes para los fondos europeos es necesario para poder alcanzar un acuerdo definitivo sobre el presupuesto plurianual de la UE para los próximos siete años, después de que se cerrara la reforma de la Política Agrícola Común (PAC).
“Cuanto más retrasamos esto, más cuestionamos el impacto de más de 400.000 millones de euros en inversiones en toda Europa y la posibilidad de (fomentar) la recuperación y el crecimiento”, señaló Hahn a los Veintiocho.
De acuerdo con el comisario de Política Regional, el acuerdo está cerca y por eso se requiere ahora un consenso sobre los pocos asuntos pendientes: la condicionalidad macroeconómica, la reserva en función del rendimiento, la cofinanciación y la financiación adelantada.
La condicionalidad macroeconómica obligaría a los países a cumplir determinados indicadores económicos, como el déficit, para poder recibir las ayudas regionales.
Tampoco hay acuerdo todavía sobre la propuesta para limitar parte de la entrega de los fondos en función de los resultados de esas inversiones, ni sobre la posibilidad de adelantar las ayudas a las autoridades nacionales.
Las tasas de cofinanciación, por su parte, fijan el porcentaje de inversiones que deberán aportar las autoridades nacionales a los proyectos financiados por la Unión Europea (UE).
“Urjo a los Estados miembros y al Parlamento a explorar un terreno común, superar sus diferencias y cerrar el acuerdo cuando se reúnan para las cruciales conversaciones a tres bandas (con la Comisión) del miércoles”, indicó Hahn.
El comisario austríaco también consideró importante un pronto acuerdo para que los inversores privados sepan el monto disponible para cada Estado miembro y cada región para que puedan aportar financiación y ayudar así en unas circunstancias económicamente y presupuestariamente difíciles para los países.
Un aspecto debatido es el problema que puede surgir cuando la situación económica de un Estado miembro es difícil, pues eso podría influir en su capacidad de cofinanciar los proyectos y para la CE a adelantar recursos bajo estos criterios.
Hahn explicó que la CE ha hecho propuestas en algunas áreas que no distorsionarían la condicionalidad macroeconómica pero que suponen “algunos ajustes” que deberían permitir al PE cerrar un acuerdo con los países miembros.
El PE ha pedido en varias ocasiones que se introduzcan salvaguardas para evitar una reprogramación demasiado frecuente, por lo que la CE ha dejado claro que no será posible en dos años consecutivos.
También ha eliminado el requisito del pacto por la estabilidad y el crecimiento al considerar que la reprogramación no puede contribuir a la reducción del déficit, y ha ofrecido la posibilidad de aportar más detalles sobre los criterios que se tendrían que tener en cuenta sobre la situación económica y social de un país miembro en la suspensión de los fondos, entre otros aspectos.
La política de cohesión comprende cinco recursos distintos: el fondo europeo de desarrollo regional (FEDER), el fondo social europeo (FSE), los fondos de cohesión, los fondos de desarrollo agrícola y rural y el fondo europeo marítimo y de pesca.
El Consejo de Asuntos Generales comenzó además a trabajar en el proyecto de conclusiones de la próxima cumbre europea de los días días 24 y 25 que por ahora incluye cuatro puntos sobre economía digital e innovación, crecimiento y empleo, unión monetaria y económica y relaciones exteriores.