Un tribunal del norte de China inició hoy el juicio contra Chang Xiaobing, expresidente de las compañías estatales de telefonía China Telecom y China Unicom, que está acusado de aceptar sobornos, informó la agencia oficial Xinhua.
Chang, quien se sienta en el banquillo de los acusados en el Tribunal Popular Intermedio de la ciudad de Baoding, es sospechoso de aceptar dinero y otros bienes por valor de más de 3,76 millones de yuanes (550.000 dólares) entre 1998 y 2014, cuando desempeñó diversos cargos en el sector de las telecomunicaciones.
Según la acusación, Chang aprovechó su posición para beneficiar a empresas que le sobornaron a la hora de llevar a cabo contrataciones o compras de equipamiento, unos delitos que ya ha confesado y reconocido, aseguró hoy la nota oficial de Xinhua.
Chang presidió China Unicom, la segunda mayor telefónica del país, entre 2004 y 2015, cuando que pasó a liderar la rival China Telecom, tercera firma del sector en el país, hasta que en agosto de ese año comenzaron las investigaciones contra él.
Entonces, informaciones de la prensa de Hong Kong vincularon a Chang con el exgeneral Guo Boxiong, condenado un año después a cadena perpetua por sobornos.
Según esas informaciones, Chang vendió a la familia de Guo un edificio de propiedad estatal en Pekín a un precio mucho menor que el tasado.
El presidente de China Telecom es el último de una larga lista de ejecutivos de grandes firmas estatales chinas que están siendo investigados o juzgados por corrupción, como parte de la campaña antifraude que desde la llegada al poder del presidente Xi Jinping, en 2013 ha llegado a todos los estamentos del poder en el país.