Dos centenares de rabinos procedentes de toda Europa se reúnen desde hoy en la capital alemana, por primera vez desde el final del régimen nazi, en la Conferencia Europea de Rabinos con ocasión del 75 aniversario de “la noche de los cristales rotos”.
Durante la reunión, que se prolongará hasta el próximo martes, los religiosos judíos pretenden tratar, entre otros temas, la protección de los derechos de las mujeres judías a quienes sus maridos niegan el divorcio.
En la inauguración del congreso, los asistentes, junto al ministro de Interior alemán, Hans Peter Friedrich, y el presidente del Consejo Central de los judíos alemanes, Dieter Graumann, recordaron a las víctimas del pogromo nazi del 9 de noviembre ante la antigua sinagoga berlinesa “Beth Zion”.
En declaraciones ayer a la agencia alemana DPA, el presidente de la Conferencia Europea de rabinos, Pinchas Goldschmidt, dijo que, con la conferencia en el 75 aniversario del pogromo de noviembre, quieren “dar una señal para el recuerdo de la Shoa y del renacimiento de la vida judía en Alemania”.
Al mismo tiempo, Goldschmidt mostró su preocupación por la creciente animosidad que dice observar en Europa contra las religiones minoritarias como el judaísmo y el islám, que, según él, tienen un espacio “cada vez más pequeño”.