El propio Montoro pidió acudir a la Cámara dar cuenta de esta medida que tiene como objetivo evitar que el Gobierno de Carles Puigdemont utilice esos fondos públicos para organizar el referéndum independentista del 1 de octubre. De hecho, esta intervención parcial de la cuentas catalanas se decidió un día después de que el vicepresidente de la Generalitat de Cataluña, Oriol Junqueras, comunicara a Hacienda que no iba a informar semanalmente de los gastos del Ejecutivo autonómico.
Según han explicado a Europa Press fuentes parlamentarias, se está sondeado a los distintos portavoces de la Comisión de Hacienda con la idea de fijar la comparecencia de Montoro para este miécoles por la tarde.
El pasado viernes, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Montoro explicó que el Gobierno ha tomado esta decisión “ante la situación de manifiesta ilegalidad” en que está incurriendo el Ejecutivo de Carles Puigdemont. El Gobierno catalán ya ha adelantado su intención de recurrir la medida.
El Gobierno de Rajoy admite que “estas medidas afectan a la autonomía financiera de la Generalitat”, pero las justifican por la “excepcionalidad de la situación” y en base a la Ley de Estabilidad Presupuestaria.
Eso sí, Montoro resaltó que esta medida “no afecta al ejercicio de las competencias” y que la Generalitat seguirá decidiendo qué cantidad de dinero va a Sanidad, a Protección ciudadana y Educación.