El hombre armado con un cuchillo que irrumpió ayer en el puesto fronterizo de Beni-Enzar de Melilla al grito de “Alá es el más grande” ha pasado hoy a disposición judicial.
Fuentes policiales han informado a Efe de que el detenido, tras pasar la noche en los calabozos de la Jefatura Superior de Policía, ha sido trasladado por varios agentes a la sede de los juzgados en Melilla.
La Delegación del Gobierno informó ayer de que podría ser un marroquí de 29 años que no reside en la ciudad autónoma.
El hombre, armado con un cuchillo apuntando a su cuerpo, irrumpió ayer a primera hora de la mañana en el puesto fronterizo de Beni-Enzar al grito de “Alá es el más grande”, y fue reducido por ocho policías, uno de los cuales resultó herido de forma leve en una mano.
Los agentes le redujeron sin necesidad de esgrimir sus armas de fuego, gracias a que uno de ellos cogió una de las barreras de plástico triangulares de gran tamaño que se utilizan para controlar el paso de vehículos y, por la espalda, se la tiró a la cabeza, provocando su caída.