El Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación explica la necesidad de abrir un Consulado Honorario en la tercera mayor ciudad de Mauritania por el volumen de intercambios comerciales entre los dos países, dado que España figura entre los principales socios comerciales del país africano.
Pero también se justifica porque Rosso es ciudad de tránsito de inmigrantes y “punto de control en materia de seguridad contra el tráfico de estupefacientes y contra el terrorismo”, según detalla la disposición publicada en el BOE.
Otro de los motivos por los que se decide abrir esta oficina tiene que ver con la extensión de Mauritania y la precariedad de su red de carreteras, que aconsejan abrir un Consulado Honorario para atender a la colonia española asentada en el suroeste del país como a los no residentes que atraviesan Mauritania camino de otros países subsaharianos. Y es que Rosso es paso obligado si se viaja entre Nuakchot, capital de Mauritania, y Dakar, en Senegal.
El Consulado Honorario, que tendrá su sede en Rosso, cubrirá las regiones de Trarza (parcialmente), Guidimaka, Brakna y Gorgol, y dependerá de la Embajada de España en Mauritania. El jefe de la oficina tendrá categoría de cónsul honorario.
Un cónsul honorario sólo puede ejercer un número limitado de las funciones consulares permitidas por el derecho internacional. No suele ser nacional del país para el que actúa, sino que tiene nacionalidad del país de residencia o, incluso, de un tercer Estado, pero en cualquier caso deben ser personas bien relacionadas y con influencia en el país donde operan. Por eso mismo pueden ser a la vez cónsules honorarios de dos o más países.