El pastor protestante norirlandés Harold Good, que intervino en el desarme del IRA y también ha seguido el proceso de paz en el País Vasco, pidió hoy “reciprocidad” a los Gobiernos español y francés tras la entrega de armas de ETA y, de ese modo, poner en marcha el acercamiento de presos.
“Tras la entrega de armas, debe haber algún tipo de reconocimiento visible desde el Gobierno español, en particular, y desde el francés. Siempre que se produce la resolución de un conflicto, de cualquier tipo, en cualquier lugar, se necesita lo que llamamos reciprocidad, que consiste en recibir algo a cambio”, afirmó el religioso.
En un encuentro con la prensa en Bruselas añadió que es “una expectativa y demanda muy razonable el acercamiento de los presos para que estén más cerca de sus seres queridos y familiares, en particular, aquellos que tienen un delicado estado de salud”.
Good realizó esas declaraciones antes de participar este martes en la conferencia 'Proceso de desarme: hacia una paz duradera en el País Vasco', organizada por el Grupo de Amistad Vasco, al que pertenecen varios eurodiputados, en la sede bruselense del Parlamento Europeo.
El pastor aseguró que acercar los presos a las cárceles vascas sería “una respuesta muy potente” tras la entrega de armas de la banda terrorista.
Good destacó que, en el proceso norirlandés, abordar la cuestión de los presos “marcó una gran diferencia” y abrió las puertas a nuevas posibilidades.