Israel detuvo hoy a un palestino en la ciudad cisjordana de Hebrón que, según la policía, portaba un cuchillo y planeaba apuñalar a los guardas israelíes en la ciudad, la única palestina con una colonia judía en su núcleo urbano.
El suceso tuvo lugar esta tarde en el centro de Hebrón, cerca de la Cueva de los Patriarcas o Mezquita de Ibrahím, mitad sinagoga y mitad mezquita y donde para el judaísmo, el cristianismo y el islam están enterrados los patriarcas bíblicos.
“El sospechoso despertó dudas de la Guardia de Fronteras que vigila el puesto de control permanente, que le instaron a parar. Pero el sospechoso continuó acercándose, ante lo que le dispararon y lo aprehendieron”, explicó un comunicado policial.
“En su cuerpo portaba un cuchillo con el que supuestamente trataba de atacar a las fuerzas”, añade la nota, que agrega que el presunto atacante, de 15 años y residente de la localidad de Dura, cercana a Hebrón, está siendo interrogado.
La detención tiene lugar un día después de que cinco personas fueran asesinadas en dos ataques palestinos: dos israelíes en un apuñalamiento múltiple en un edificio de Tel Aviv y tres personas -un israelí, un estadounidense y un palestino- en un ataque con un arma automática en una carretera que conecta asentamientos judíos en Cisjordania, en el que también resultaron heridas cinco personas.
Ambos atacantes fueron reducidos y apresados y son residentes del distrito de Hebrón, el primero de ellos natural de Dura.
Estos sucesos se enmarcan en una oleada de violencia que se inició a principios de octubre y en la que se han registrado más de 80 ataques de palestinos contra israelíes, según fuentes oficiales israelíes, en los que han muerto 19 personas y 172 han resultado heridas.
En este periodo han muerto 90 palestinos (alrededor de la mitad atacantes o supuestos atacantes) por fuego israelí y más de 2.500 han resultado heridos, la mayoría en enfrentamientos con las fuerzas de seguridad israelíes en Gaza, Cisjordania y Jerusalén Este.