El rey Abdalá de Jordania ofreció hoy al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, su ayuda y la de los países árabes para “limar las asperezas” en un posible plan de paz palestino-israelí.
“El presidente Trump entiende los matices y desafíos. Todos tenemos una responsabilidad y nuestro trabajo es facilitar que los palestinos e israelíes se acerquen”, aseguró Abdalá en una rueda de prensa conjunta con el presidente en la rosaleda de la Casa Blanca.
Trump se limitó a asegurar que “espera tener éxito”, ya que trabaja “muy, muy duro” para que “finalmente” haya paz entre Israel y los palestinos.
“Déjenme decirles. Yo heredé un desastre”, zanjó el mandatario norteamericano, que ha delegado las negociaciones sobre el conflicto palestino-israelí a su yerno y asesor de la Casa Blanca, Jared Kushner.
Abdalá dijo que la actitud de Trump hacia la necesidad de paz entre palestinos e israelíes es una “señal de ánimo”, al tiempo que recordó el compromiso de la Liga Árabe para contribuir a las negociaciones.
El nuevo Gobierno estadounidense ha prometido resucitar las suspendidas conversaciones de paz entre Israel y la Autoridad Nacional Palestina (ANP), pese a que Trump ha llegado a decir que no considera una necesidad mantener la posición política de los dos Estados.
Abdalá abogó por que los países árabes “lleven el peso” para que palestinos e israelíes acerquen posturas con el “liderazgo del presidente (Trump)”.
Según el monarca jordano, una solución del conflicto palestino-israelí es también parte de la estrategia para resolver el extremismo en Oriente Medio.