A la salida de su comparecencia en la Comisión de Asuntos Exteriores, Margallo se ha pronunciado en estos términos al ser preguntado por la reunión que han mantenido el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el jefe del Ejecutivo catalán.
En declaraciones a los periodistas, Margallo ha admitido que dicho encuentro “no ha sido cordial” y, como diputado de las Cortes Constituyentes, ha llamado a mantener el diálogo que hubo en aquella época para establecer reglas de convivencia para resolver los problemas que puedan surgir entre el Gobierno y la Generalitat.
Dicho esto, ha subrayado la idea defendida por Rajoy de que el margen para salvar las divergencias surgidas entre ambas administraciones es la Constitución, que establece que “una secesión no es posible”, tampoco dentro del ordenamiento europeo.
SI SE VA, FUERA DE LA UE
“Es decir, si Cataluña fuese a una secesión unilateral, se encontraría fuera de la UE en ese mismo momento, y tendría que pedir la adhesión y ésta debería ser admitida después por unanimidad”, ha indicado el jefe de la diplomacia española.
Y ha añadido que ese horizonte “no es posible” porque, según ha explicado, Europa acaba de firmar el manifiesto de Berlín en el que, para evitar situaciones de bloqueo, los tratados se pueden modificar por mayoría absoluta, salvo el tema de las adhesiones, que necesitarían la unanimidad“.
“Y serían muchos los países los que no estarían dispuestos a dar validez jurídica a una declaración unilateral de independencia”, ha apostillado.