La primera ministra británica, Theresa May, dijo hoy que el programa nuclear norcoreano amenaza “a toda la comunidad internacional” y se comprometió a “seguir trabajando” con sus aliados para ejercer presión sobre el Gobierno de Pyongyang.
May hizo esta declaración durante la reunión semanal, en su despacho de Downing Street, con su consejo de ministros, el mismo día en que se reanuda la actividad parlamentaria tras el receso veraniego, según explicó su portavoz oficial.
La líder conservadora aludió al programa de Corea del Norte después de que el Ministerio de Asuntos Exteriores convocara al embajador norcoreano en Londres, Choe Il, para expresarle su condena por el ensayo nuclear realizado el pasado domingo.
El secretario de Estado para Asia, Mark Field, planteó la posición británica al diplomático norcoreano, en una reunión de la que de momento no se han difundido más detalles.
Corea del Norte realizó el domingo su sexto ensayo atómico y el más potente hasta ahora, con un artefacto termonuclear -una supuesta bomba de hidrógeno- que, según Pyongyang, puede instalarse en uno de sus misiles balísticos intercontinentales.
La intensificación de las pruebas armamentísticas de Corea del Norte, que el pasado martes lanzó además un misil que sobrevoló el norte del territorio japonés antes de caer al Pacífico, ha suscitado la condena de la comunidad internacional y amenaza con desencadenar una escalada armamentística en la región.