El PSN ha cerrado este viernes “una ronda (de contactos) ilusionante para todos los navarros, con una clara voluntad de sumar los 23 escaños, que superarían los 20 de la derecha”, según ha indicado el secretario de Organización del PSN, Ramón Alzórriz. Los socialistas navarros han mantenido reuniones con Geroa Bai, Podemos y, hoy mismo, con Izquierda-Ezkerra.
“No daremos nuestros votos a Navarra Suma, por lo tanto a Javier Esparza, para que sea presidente, ni negociaremos con EH Bildu”, ha insistido Alzórriz, pese a que la candidata María Chivite necesitará de la abstención de la formación independentista para su investidura. En esta línea, ha explicado que él no ve “dos versiones” en el Partido Socialista.
“Yo escuché al presidente del Gobierno y avaló las palabras que he estado diciendo estos tres días aquí, que había sintonía y que PSOE y PSN somos lo mismo; dijo que la consulta a la militancia era obligatoria y vinculante y que hablaría con todos los partidos, que no había que pactar con Bildu y que abriría una ronda de contactos para la gobernabilidad de España y exclusivamente para la gobernabilidad de España”, ha agregado.
Sobre la “prioridad” de formar gobierno a nivel nacional, manifestada por diferentes cargos, entre ellos la ministra Carmen Calvo o el secretario de Organización, José Luis Ábalos, que consideró “sensata” la propuesta de Navarra Suma de abstenerse en una investidura de Sánchez, Alzórriz ha defendido que “las prioridades no son excluyentes y la prioridad es el Gobierno de España y la prioridad es el Gobierno de Navarra”.