El cabecilla de las FARC Ernesto Hurtado Peñaloza, conocido como “El negro Eliécer”, al que las autoridades colombianas vinculan con el narcotráfico y con una matanza de 34 campesinos, murió en combates con el Ejército, informaron hoy fuentes castrenses.
La región donde murió, el Catatumbo, en el nordeste del país, es donde presuntamente se encuentra “Timochenko”, máximo jefe de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), y las autoridades consideran a “El Negro Eliécer” como un hombre cercano al líder.
Le acusan también de ser el contacto entre las FARC y “Megateo”, comandante de los reductos del Ejército Popular de Liberación (EPL).
“Es muy importante el golpe, pues además este individuo era el socio de alias 'Megateo' en Norte de Santander para generar recursos del narcotráfico”, dijo el ministro de Defensa de Colombia, Juan Carlos Pinzón.
“El Negro Eliécer” también es acusado de la masacre en 2004 de 34 campesinos “raspachines” (recolectores) de hoja de coca en la finca La Duquesa, situada en la zona rural de La Gabarra, una área que en ese entonces las FARC se disputaban con las paramilitares Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).
El cabecilla guerrillero murió en combates librados el domingo en el área rural del municipio de Hacarí, situado en el departamento del Norte de Santander, donde actúa el frente 33 de las FARC.
“El Negro Eliécer” era el comandante de la Columna Móvil Antonia Santos, una de las unidades de ese frente, y ya había sido dado por muerto por las autoridades colombianas en octubre de 2011 junto a otros trece subversivos.
A este dirigente guerrillero, que ingresó a las FARC en 1982, las autoridades le atribuyen la articulación de todos los brazos del narcotráfico en el Norte del Santander con el Ejército de Liberación Nacional (ELN), el EPL, las llamadas bandas criminales y carteles internacionales.
En la operación militar también murió “Tatiana”, identificada como responsable de finanzas de la Columna Móvil Antonia Santos.