El primer ministro húngaro, el conservador Viktor Orbán, calificó hoy de “chiste político” la exigencia del ministro luxemburgués de Exteriores, Jean Asselborn, de suspender o expulsar a Hungría de la Unión Europea (UE), informó la agencia búlgara BTA.
Según la fuente, Orbán hizo esa declaración durante una visita con su homólogo búlgaro, el populista de centro derecha Boiko Borisov, a la frontera búlgaro-turca.
Orbán alabó los esfuerzos de Bulgaria para sellar su frontera y prometió apoyar a Sofía en su exigencia de una mayor ayuda de los socios comunitarios para vigilar esa delimitación externa comunitaria, algo que será planteado en la cumbre de jefes de Estado y Gobierno de la UE el próximo viernes en Bratislava.
A pocos días de esa cita en la que 27 de los 28 socios comunitarios (todos menos el Reino Unido) estudiarán el futuro de la UE tras el “brexit”, Asselborn exigió, en una entrevista publicada este martes por el diario “Die Welt”, la exclusión de Hungría de la Unión Europea como única alternativa para salvaguardar la cohesión y el mantenimiento de los valores comunitarios.
Todo país “que como Hungría construye vallas contra los refugiados de guerra o vulnera la libertad de prensa y la independencia de la justicia, debería ser excluido temporalmente o, en caso necesario, para siempre de la UE”, dijo el jefe de la diplomacia luxemburguesa.
A pesar del rechazo de otros responsables de la UE a la idea de excluir a un socio, Asselborn insistió, en unas declaraciones que publica hoy el diario “Süddeutsche Zeitung”, en sus críticas a Hungría por su línea dura en la crisis de refugiados.
“No se trata de actuar contra un país o un pueblo”, sino de preservar “los valores fundacionales” de la UE, subrayó.