La marcha atrás de Susana Díaz arroja al PSOE a un tsunami de candidatos

La renuncia de Susana Díaz a presentarse a la Secretaría General del PSOE ha despejado dudas y ha abierto la espita para que empiecen a animarse precandidatos que quieren optar al relevo de Rubalcaba, lo que ha desatado todo un tsunami de aspirantes a dirigir el PSOE.

Dos nombres con peso específico, el exministro Juan Fernando López Aguilar y la portavoz parlamentaria Soraya Rodríguez, aparecieron por sorpresa, en la tarde del miércoles en las quinielas. La diputada no irá en ningún caso, y si el eurodiputado canario se atreviese a hacerlo, que es poco problable, tendría pocas posiblidades. Pero ambos se han dejado caer.

Quien ya está decidido a dar el paso en cuestión de horas es el diputado madrileño Pedro Sánchez. En la mañana de este jueves anunciará su candidatura y, por la tarde, participará en su primer acto político con militantes madrileños.

Sánchez, que se ha ido creciendo a medida que pasaban los días y ha ganado mucho protagonismo político y mediático, está más que animado para intentarlo y, aunque la presidenta de Andalucía ha dicho que no apoyará a nadie, crecen las voces que señalan que la federación más importante del PSOE podría darle un gran apoyo.

Madina, mientras tanto, sigue cauto. Posiblemente hasta el viernes no anuncie públicamente su candidatura. Quiere esperar un poco más, y ver si aparecen nuevas operaciones políticas en el partido dignas de ser tenidas en cuenta. De no ser así, a día de hoy es el claro favorito para hacerse con las riendas del partido.

Ambas candidaturas se dan por seguras y habrán de sumarse a la ya anunciada por José Antonio Pérez Tapias, de Izquierda Socialista.

A todo este río revuelto se sumó un nombre, en principio ya descartado: Patxi López. Este miércoles corrió como la pólvora el rumor de que el exlehendakari podría replantearse su negativa a ser candidato.

Algunos veteranos dirigentes del PSOE recordaron a eldiario.es que siempre fue la operación que diseñaron en La Moncloa José Luis Rodríguez Zapatero, José Blanco y el propio Alfredo Pérez Rubalcaba, y no verían mal volver a la idea de origen en las actuales circunstancias.

Sin embargo, el propio Patxi López descartó estar en ninguna operación y reiteró su deseo de no aspirar a la secretaría general del PSOE, aunque ya no esté Susana Díaz en la pelea.

No obstante, queda aún tiempo para que puedan pasar cosas. Nadie será candidato del PSOE hasta el 27 de junio aunque la recogida de avales empiece mañana. Y nadie tiene que presentarse ni anunciar nada previamente. Sólo conseguir 10.000 firmas legales de los militantes y depositarlas en Ferraz el último viernes de este mes. Es el único requisito.

A todo lo anterior hay que sumar el nombre de Alberto Sotillos, uno de los líderes de una corriente minoritaria y no oficial dentro del PSOE que se denomina Socialismo Democrático, que este miércoles anunció que también quiere aspirar a ser secretario general.

Dicha corriente, compuesta por pequeños grupos de militantes socialistas muy activos en las redes socialistas, como Bases en Red, cuenta con pocas posibilidades de alcanzar los 10.000 avales mínimos para entrar en la competición, pero se ha decidido a dar el paso.

Pero aún pueden darse muchas sorpresas en estas dos semanas antes de que finalice el proceso. Y, de aparecer un candidato fuerte, las 10.000 firmas las puede recopilar en dos días. Pero, de momento, todo apunta a que el PSOE tendrá una cara nueva.

Con el terreno tan abierto los nueve barones que se apresuraron a apoyar a Díaz antes de tiempo estudian ahora sus posibilidades de apoyo entre los nombres que ya están en liza, o los que puedan ir apareciendo durante el proceso.