“Ha sido un ejemplo de honradez. En su vida personal los que la conocen saben que vivía con absoluta modestia, en un piso de alquiler, veraneando en casa de su hermana, con una vida discreta, sencilla. Y, sin embargo, se le ha atribuido todo lo contrario: parecería que era ella el símbolo de la corrupción”
En declaraciones a 13tv recogidas por Europa Press, el titular de Justicia ha lamentado que se haya “simbolizado” la corrupción en la figura de Rita Barberá y ha llamado a respetar la presunción de inocencia hasta que haya una sentencia.
“Una querella no puede llevar a tachar a alguien de corrupto”, ha enfatizado Catalá, quien ha subrayado que “ojalá” su muerte sirva de reflexión porque “no debemos anticipar las consecuencias de una acusación”.
“Para eso están los tribunales, para que se pruebe, se demuestre, se sentencie lo que corresponda y hasta ese momento no anticipemos los juicios”, ha añadido el ministro, quien ha recordado que la lentitud de la justicia favorece que se especule sobre el caso.
En el caso de la exalcaldesa valenciana, ha explicado que se ha visto ante una “actitud tan dura” de imputarle un delito “no acreditado, no probado y no sentenciado tan grave” que le provocaron un “sentimiento de pena, de tristeza, de incomprensión que lamentablemente le ha acompañado hasta sus últimos minutos”. “Me produce muchísima pena, mucha frustración”, ha lamentado.