El Gobierno italiano ha convocado hoy al embajador austríaco en Roma, René Pollitzer, por unas declaraciones referidas “al desplazamiento de tropas en el Brennero”, el puerto en los Alpes fronterizo entre Austria e Italia, para controlar la inmigración.
En una nota, el ministerio explicó que la convocatoria se hizo hoy por la mañana y que se encargó de ello su secretaria general, la embajadora Elisabetta Belloni.
El ministro de Defensa austríaco, Hans Peter Doskozil, al que cita hoy el diario “Kronzeitung”, ha dicho que ante la incesante llegada de inmigrantes a Italia a través del Mediterráneo el Gobierno austríaco está preparando medidas de vigilancia en la frontera.
“En vista de la situación de la inmigración en Italia tenemos que prepararnos. Preveo que muy pronto se activen los controles fronterizos y se disponga una misión de asistencia”, declaró el ministro a la publicación.
El “Kronen Zeitung” agrega, sin citar al ministro en este punto, que el ministerio austríaco ha comunicado, tras conocer las “noticias alarmantes” procedentes de las regiones italianas que acogen refugiados, que hay “disponibles” 750 soldados para la protección de las fronteras.