El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, calificó como un acto de “lealtad” la dimisión del director de la Policía Nacional, general Rodolfo Palomino, quien renunció hoy tras abrirse una investigación en su contra por presuntamente crear una trama de prostitución masculina dentro de la institución.
“Quiero agradecerle (a Palomino) los servicios prestados a la patria y a la Policía durante 38 años y su lealtad con la entidad de la que hoy se retira. Esta decisión es una muestra de esa lealtad”, dijo el presidente en una declaración desde la Casa de Nariño, sede del Ejecutivo.
Santos explicó que la salida de Palomino busca que “la investigación que cursa sobre él siga su rumbo y pueda demostrar su inocencia sin afectar a la institución”, que a partir de ahora estará dirigida por el general Jorge Hernando Nieto.
“El nuevo director de la Policía se enfrenta a una misión que es hoy más exigente que nunca. Tiene que recuperar la unidad, el buen nombre, la respetabilidad y la confianza de la Policía ante los ojos de la ciudadanía”, aseveró el presidente.
Asimismo, el mandatario aseguró que se “tomarán todas las medidas” para que la Policía siga siendo “una de las instituciones más queridas por los colombianos” y “no quede sobre ella ni un manto de duda”.
“Esperamos que los organismos encargados de las investigaciones puedan hacer claridad sobre los diferentes asuntos lo antes posible. La propia Policía y el país se lo reclaman”, agregó.
Palomino anunció hoy su dimisión después de que este martes el procurador general, Alejandro Ordóñez, abriera una investigación en su contra por la “creación y puesta en marcha de una supuesta red de prostitución masculina” dentro de la institución.
Según la Procuraduría, “se han recaudado diferentes pruebas, productos de visitas y testimonios” que presuntamente involucran a Palomino en este escándalo, donde las conductas denunciadas “podrían encadenar diversos delitos como proxenetismo, inducción a la prostitución y trata de personas de miembros de la Policía”.
El ya exdirector de la Policía, que anunció su renuncia rodeado del cuerpo de generales, aseveró que tras 38 años en la institución se retira convencido de su “absoluta inocencia” frente a los cargos que se le imputan.