El fabricante de armas estadounidense Smith & Wesson anunció hoy que en su más reciente trimestre fiscal registró unas ventas por 143 millones de dólares, con un aumento del 32 por ciento desde el mismo período del año pasado.
La firma, el fabricante de armas cortas más importante de Estados Unidos, aunque también tiene una amplia gama de rifles y accesorios, anunció que en el trimestre que cerró el 31 de octubre pasado sus beneficios netos fueron de 12,5 millones de dólares.
Esos beneficios netos son más del doble de los que tuvo en el mismo trimestre del año anterior, que fueron 5,1 millones de dólares.
Sólo en armas de fuego, excluyendo los accesorios, Smith & Wesson incrementó en un 15,2 % sus ventas en el trimestre más reciente, con 124,9 millones de dólares.
El fabricante de armas anunció también que había revisado al alza su proyección de ventas netas en el ejercicio fiscal de 2016, que cerrará el 30 de abril próximo, hasta un rango de entre 625 y 635 millones de dólares.
Hace tres meses había calculado que cerraría el ejercicio anual con unas ventas de entre los 610 y los 620 millones de dólares.
El aumento en las ventas de Smith & Wesson se produce en medio de una fuerte polémica en Estados Unidos por el incremento de los incidentes armados en el país y la necesidad de poner controles a la compra de armas de parte de civiles.
Uno de los dos rifles utilizados en la reciente matanza de la ciudad californiana de San Bernardino, en la que perecieron 14 personas y una veintena resultó herido, era una versión del popular subfusil automático AR-15 fabricada por la firma Smith & Wesson.