El Tribunal Constitucional ha declarado que la Delegación del Gobierno en Madrid vulneró los derechos del sindicato UGT al impedir una manifestación feminista por el 8 de marzo de 2021 aludiendo a motivos sanitarios por estar vigente, en ese momento, el segundo estado de alarma.
La mayor parte del pleno entiende que la decisión tomada por el organismo, todavía entonces con José Manuel Franco al frente, fue “desproporcionada” ya que en ese momento todo el mundo usaba mascarillas y existían muchas más pruebas diagnósticas además de haber empezado la vacunación de los mayores de 80 años: “Por tanto, todo ello hacía posible que quienes acudieran a la manifestación estuvieran sanos”, afirma.
Se trata de una votación inédita en el actual Tribunal Constitucional. La sentencia ha salido adelante con los votos en contra de dos magistradas progresistas, Laura Díez y María Luisa Segoviano, y con el voto a favor del resto de conservadores y progresistas aunque integrantes de ese primer grupo entienden que había que llegar a la misma conclusión con argumentos distintos.
Informa Alberto Pozas.