Vox ha cerrado su campaña reivindicándose como la “única alternativa política” contra el independentismo y el socialismo. “Si no quieren confrontar al separatismo, que se aparten, que vienen los patriotas”, ha espetado el candidato a la Generalitat, Ignacio Garriga, en un mensaje velado al PP.
El partido ultra, que arrasó al PP en Catalunya en las anteriores autonómicas con 11 escaños frente a los tres de los populares, trata de contener el ascenso del partido de Feijóo en una lucha cuerpo a cuerpo para mantenerse como el primer partido de derechas no independentista del Parlament.
Al igual que en las elecciones de 2021, Vox ha elegido la plaza d’Artós, en la zona alta de Barcelona, para su acto de cierre de campaña. El evento, que ha reunido a centenares de personas y sendas banderas de España, ha reunido al presidente de Vox, Santiago Abascal, al exdiputado de Ciudadanos Juan Carlos Girauta y a la plana mayor del partido, cargos autonómicos y a los candidatos de todas las provincias.
Garriga ha reivindicado su papeleta como la mejor opción para darle una “patada en el culo” a los “okupas” y para lograr que las escuelas sean “libres” y los padres “puedan escolarizar” a sus hijos “en español”.
Abascal, por su parte, ha hecho una llamada a los abstencionistas asegurando compartir su “hartazgo” y les ha pedido el voto para echar “a la chusma totalitaria” y a “los políticos sin palabra”.
Por Pol Pareja