El coste de la mano de obra por hora trabajada en la eurozona creció un 1,8 % durante el segundo trimestre de 2017 con respecto al mismo periodo del año pasado, mientras que en la Unión Europea (UE) el incremento fue del 2,2 %, según los datos publicados hoy por Eurostat.
Entre enero y marzo, el indicador había aumentado un 1,4 % en los diecinueve países que comparten la moneda única y un 1,6 % en los Veintiocho.
La oficina de estadística comunitaria precisó que los dos principales componentes del coste de la mano de obra son los salarios y los costes no vinculados a estas remuneraciones.
En los países del euro, los costes vinculados a los salarios por hora trabajada desde abril hasta junio anotaron un alza del 2 % y los no salariales, un 0,8 %.
En la UE, esos dos componentes crecieron un 2,4 % y un 1,6 % respectivamente.
Por actividad económica, los costes de la mano de obra en el área del euro subieron un 1,5 % en la industria, un 2 % en la construcción, un 2,1 % en los servicios y un 1,4 % en la economía no comercial.
Si se observan los datos de los Veintiocho, los costes aumentaron un 2,2 % en la industria, un 1,6 % en la construcción, un 2,7 % en los servicios y un 1,7 % en la economía no comercial.
Rumanía (18,6 %), Hungría (13 %), la República Checa (11,1 %), Bulgaria (11 %) y Lituania (10,4 %) registraron las mayores subidas interanuales, frente a la caída detectada en Finlandia (0,3 %).
España experimentó el menor incremento del club comunitario, con una subida del 0,4 %, cifra idéntica a la de Chipre.