El obispo de Bilbao, Mario Iceta, ha decretado la creación de una comisión diocesana para la protección de menores y la prevención de abusos sexuales en el seno de la Iglesia de Bizkaia.
Según ha hecho público este viernes el Obispado, la Comisión, que se constituirá en breve, se creará en el seno del tribunal diocesano y estará presidida por el fiscal promotor de la justicia de ese mismo tribunal, que se encargará de recibir las denuncias y otras informaciones sobre abusos.
Además, estará integrada por otras cuatro personas laicas más, expertas en los ámbitos civil y penal; de la investigación policial; de la enseñanza y el tiempo libre, y de Lagungo, el centro diocesano de orientación familiar para casos de abuso.
Estas personas ya han sido seleccionadas, pero la Diócesis bilbaína, que ya tiene un protocolo para la prevención de abusos publicado en su web, aún no ha hecho públicos sus nombres.
Las denuncias podrán realizarse mediante correo ordinario o personalmente ante el director de la comisión, aunque con su creación se pondrá también en funcionamiento un correo electrónico.
La comisión será competente ante toda persona que lleve a cabo una labor dentro de la Diócesis, tanto clérigos como laicos, por lo que las investigaciones serán canónicas y civiles.
El Obispado ha asegurado así que el objetivo es que la Iglesia sea “un lugar seguro” para todo el que acuda a ella, especialmente los menores y las personas vulnerables.