La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha afirmado que Estados Unidos no ha hecho “ninguna petición formal de ampliación de las bases” que tiene en España, Rota y Morón, y que desde ellas no se ha producido “ningún tipo de actuación en relación a Irán”.
En su comparecencia en la Comisión de Defensa del Congreso y en respuesta a la senadora de la Izquierda Confederal María Pilar González Modino, Robles ha afirmado ella no tiene “constancia formalmente” ni le ha llegado “ninguna petición formal” por parte de autoridades norteamericanas sobre la ampliación de sus bases.
Y ha detallado que durante la reunión bilateral que tuvo el pasado 12 de febrero con el secretario de Defensa de EE.UU., Mark Sper, le dijo a su homólogo “muy claro” que “la política de defensa se hará siempre en función de lo que diga el Parlamento español”, que tendría que aprobar una posible ampliación de las bases.
“Cualquier modificación pasara por el ámbito parlamentario”, ha reiterado para apuntar que España tiene que ser “un socio serio en los compromisos internacionales”.
Ante la petición de la senadora de que las bases “no se vean implicadas en las situaciones de tensión fomentadas por EE.UU.”, Robles ha indicado que desde ellas “no ha habido ningún tipo de actuación en relación a Irán”.
A Robles también le han preguntado por el hecho de que el Departamento de Defensa de Estados Unidos no haya elegido al astillero público Navantia para el diseño de la construcción de fragatas para la Armada estadounidense, sino a la italiana Fincantieri.
Navantia se presentó a este concurso para aportar la parte tecnológica del diseño de la mano de un socio local, General Dynamics Bath Iron Work, una de las grandes compañías del sector naval estadounidense que las construirá en su astillero de Maine.
Según Robles, Estados Unidos ha actuado por criterios empresariales y en una “economía de libre mercado”. “La oferta italiana era muchísimo más barata”, ha apuntado, y crearía muchos puestos de trabajo en un astillero “cercano a un determinado partido”.