La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha afeado esta mañana a los empresarios que no hayan entrado a negociar la subida del salario mínimo interprofesional (SMI) este año. “El Gobierno negocia, los sindicatos negocian”, han advertido, mientras que ha lamentado que las patronales llegaron a la mesa de negociación y salieron de ella diciendo que querían “cero euros, congelar” los salarios más bajos. “Eso no es negociar”, ha destacado Díaz.
La responsable de Trabajo ha recordado que el Ejecutivo no tiene la obligación de negociar la subida del salario mínimo, ya que solo es preceptiva una consulta a los sindicatos y patronales. “Pero he querido que hubiera diálogo social”, ha destacado, sobre la voluntad del Gobierno de alcanzar una subida consensuada.
No obstante, la vicepresidenta segunda no se ha dado por vencida y ha insistido en que perduran los contactos y que va a intentar “un acuerdo con el mayor número de interlocutores sociales posibles”. Dada la cerrazón de los empresarios, todo apunta a que este pacto se fraguará solo entre el Gobierno y los sindicatos.
De darse un acuerdo solo bipartito, entre el Gobierno y los representantes de los trabajadores, caen las mayores las presiones a la baja sobre la cuantía de incremento del salario mínimo (aunque la vicepresidenta Nadia Calviño ha insistido en que el incremento será “limitado” este año). Yolanda Díaz no ha querido hablar de cantidades de aumento del SMI, aunque se ha vuelto a referir al estudio del comité de expertos en el tema, que recomendó una subida de entre 12 y 19 euros.
Por Laura Olías.