En Canarias hay un pediatra por cada 1.635 menores de 15 años
Las asociaciones pediátricas recordaron este lunes que en España faltan unos 720 profesionales en Atención Primaria para que haya un pediatra por cada mil habitantes menores de 15 años, y señalaron que en la actualidad la media es de uno por cada 1.134.
Así consta en el informe Necesidades pediátricas de Atención Primaria elaborado por la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria (SEPEAP) y por la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEP).
Por encima de la cifra de un pediatra por cada mil habitantes de menos de quince años, se sitúan Navarra (uno por cada 849 niños); Asturias (uno por cada 907), Galicia (911), Cantabria (943), País Vasco (968) y Cataluña (975).
Por debajo de ese número están Andalucía (uno por cada 1.340 niños); Aragón (1.074); Baleares (1.249); Castilla y León (1.283); Castilla-La Mancha (1.473); Comunidad Valenciana (1.046); Madrid (1039); La Rioja (1.107); Murcia (1.237); Extremadura (1.413), Canarias (1.635), Ceuta (1.738) y Melilla (2.208).
Según advirtieron los representantes de ambas sociedades médicas, estas cifras podrían incrementarse por el envejecimiento de la población, la inmigración y enfermedades como la obesidad, el asma o la hiperactividad, que cada vez son más frecuentes.
Ante esta situación, reclamaron el incremento del número de estudiantes de Medicina, así como el de plazas de médicos internos residentes (MIR).
Según explicó el presidente de SEPEAP, José Luis Bonal, sobre este último punto existe un compromiso del Ministerio de Sanidad para aumentar el número de pediatras hasta 2010 en función de las necesidades de cada comunidad autónoma.
Asimismo defendieron prolongar la edad de jubilación de los pediatras que deseen continuar en activo “con los correspondientes incentivos económicos” y captar pediatras de otros países, preferentemente de América Latina.
El presidente de la AEP, Juan Ruiz Canela, consideró que el modelo actual de asistencia al niño en España, “que es modelo en muchos países, porque se hospitaliza poco” y los problemas se resuelven en Atención Primaria, “está en peligro”.
Por ello, aseguró, los pediatras quieren convertirse en “abogados” de los usuarios de este servicio que, al ser niños, son menos visibles, porque no opinan.
Ruiz Canela aludió a un “progresivo aumento” del uso de los servicios médicos al aumentar el nivel de renta y los avances tecnológicos, que precisan “más trabajadores y más cualificados”.
Asimismo incidió en la feminización de la profesión, una condición que exige la flexibilización de los horarios para que las pediatras puedan conciliar su trabajo con la vida laboral, así como capacidad de organizarse y tiempo para la investigación continuada e investigación.
