Tiene razón Rubalcaba cuando dice que el Gobierno sólo ha desclasificado uno de los documentos emitidos en esos días de crisis consecuencia de los atentados de Madrid. Cualquier experto en estos asuntos sabe que en momentos de esa naturaleza, los servicios de inteligencia emiten decenas de “notas de difusión”, que se elevan a Presidencia del Gobierno para que el gabinete o célula de gestión de crisis tome las determinaciones más necesarias para la seguridad del Estado. Es lo que se llama “facilitar inteligencia” al Gobierno después de obtener información de los “órganos de adquisición”, procesarla, analizarla y culminar el ciclo de inteligencia previo a la elaboración de la nota de difusión. Claro que es posible que en las primeras horas posteriores a los atentados, el CNI atribuyera la autoría a ETA, pero también parece comprobado que antes de que terminara ese mismo jueves, los servicios secretos ya tenían la certeza de que se trataba de radicales islámicos.