Animación andaluza para el exigente público infantil de San Sebastián

Uno de los secretos para la prensa e invitados extranjeros en el Festival de San Sebastián es la enorme implicación de la ciudadanía insuflándole vida. Ni en Cannes ni en Venecia se ven tan larguísimas colas de espectadores ávidos por comprar entradas o acceder a una sala. Algo que da fortaleza a un festival que durante 61 ediciones ha inoculado este hábito cultural sobre los donostiarras y sobre los numerosos visitantes.

Por eso el Zinemaldia tiene una película para cada clase de espectador, empezando por su edad. Para los más pequeños, el Festival de cine infantil programa en el Velódromo y en algunos puntos de la Gipúzcoa cine de animación para verse, o bien en compañía de la clase y los profesores, o de la familia.

La andaluza 'El corazón del roble', de Ricardo Ramón y Ángel Izquierdo con guión del cordobés Antonio Zurera, tiene diez pases doblados al euskera en esta edición del Festival tanto en la pantalla más grande de la ciudad, y casi del mundo, como en salas de Tolosa, Zumárraga, Beasaín y Arrasate. Miles de niños y niñas vivirán las aventuras del pequeño elfo en la Colina del Dragón, durante esta semana, en horario escolar.

Seguir leyendo en CineAndCine...

Uno de los secretos para la prensa e invitados extranjeros en el Festival de San Sebastián es la enorme implicación de la ciudadanía insuflándole vida. Ni en Cannes ni en Venecia se ven tan larguísimas colas de espectadores ávidos por comprar entradas o acceder a una sala. Algo que da fortaleza a un festival que durante 61 ediciones ha inoculado este hábito cultural sobre los donostiarras y sobre los numerosos visitantes.

Por eso el Zinemaldia tiene una película para cada clase de espectador, empezando por su edad. Para los más pequeños, el Festival de cine infantil programa en el Velódromo y en algunos puntos de la Gipúzcoa cine de animación para verse, o bien en compañía de la clase y los profesores, o de la familia.