El CD Tenerife y la UD Las Palmas son los únicos que no saben ganar fuera
Cada jornada que pasa se agudiza la sensación de que el CD Tenerife tiene una doble cara. La buena la muestra en el Heliodoro, donde saca adelante un alto porcentaje de sus compromisos. Y la mala, cuando le toca salir de la isla.
Los números resultan inmisericordes en ese sentido. Después de siete desplazamientos, el conjunto blanquiazul es, junto a la UD Las Palmas, el único equipo de la categoría de plata que todavía no ha tenido ocasión de celebrar un triunfo a domicilio, sensación que sí conocen los otros 20 equipos de la categoría.
El CD Tenerife, que puede preciarse de presentar el segundo mejor balance al amparo de sus aficionados (14 puntos por 18 del Málaga sobre 21 posibles), desciende sin embargo a la decimoctava posición si hablamos de sus números en calidad de visitante (5 puntos de 21), sólo superiores a Las Palmas, Xerez y Cádiz.
Para más inri, el síndrome visitante volvió a hacerse patente el pasado fin de semana en Albacete, donde el equipo de José Luis Oltra dejó escapar una inmejorable oportunidad para haber sumado su primer triunfo fuera, sobre todo después de que el conjunto manchego se quedara en inferioridad mediada la segunda parte.
El malestar tras el partido era evidente, tal y como se desprende de las palabras del director deportivo de la entidad, Alfonso Serrano, habitualmente comedido y que en esta ocasión llegó a señalar en Radio Club Tenerife que “fue como un partido de los jueves” en lugar de uno de competición oficial. “No supimos ganar y tampoco tuvimos la intensidad necesaria para hacerlo”, se sinceró.
Este lunes era Ayoze el que confesaba no entender “que cambiemos tanto de una semana a otra; es una cosa que nos preguntamos”, dijo antes de recordar que ante el Xerez “hicimos un partido muy completo, con intensidad y momentos de buen fútbol, pero en Albacete no terminamos de estar bien”.
Es por eso que el canterano admitía que “estamos bastante jodidos porque teníamos ilusiones de conseguir una victoria y engancharnos a los puestos de arriba, pero no pudo ser”.