Stoner, Lorenzo y Faubel imponen su ley en Brno
El australiano Casey Stoner (Ducati Desmosedici GP 7) sumó en la República Checa su séptima victoria de la temporada y lo hizo de una forma tan clara y contundente que va camino de sentenciar antes de tiempo el título mundial que ni el estadounidense Nicky Hayden (Honda RC 212 V) ha podido defender ni el italiano Valentino Rossi (Yamaha YZR M 1) está en disposición de recuperar.
Desde la primera hasta la última vuelta Stoner fue en cabeza de la carrera y sólo en los instantes iniciales el estadounidense John Hopkins (Suzuki GSV RR) fue capaz de seguir su ritmo, pero esa situación no duró demasiado y a ritmo de vuelta rápida de carrera en más de una ocasión el piloto de Ducati consolidó su victoria y también el paso hacia su primer título mundial.
Stoner ha demostrado que el equipo que forma con Ducati y Bridgestones es casi imbatible y eso, con pilotos en pista de la talla del siete veces campeón del mundo Valentino Rossi es altamente significativo, sin olvidar que, con poco acierto, también luchan por estar lo más arriba posible pilotos como el actual campeón del mundo, el estadounidense Nicky Hayden, o el español Dani Pedrosa (Honda RC 212 V).
Tanto Hayden como Pedrosa han reconocido que la situación ha mejorado con respecto a Laguna Seca (Estados Unidos), pero todavía se encuentran lejos, como Rossi, de poder plantar batalla en igualdad de condiciones a Stoner.
Dominio español
Si la carrera de MotoGP tuvo poca historia, por no decir nada, algo semejante ocurrió en el cuarto de litro, en donde Jorge Lorenzo (Aprilia), templó y mandó para sumar, como Stoner, su séptimo triunfo de la temporada, si bien en su caso la ventaja respecto al más inmediato de sus perseguidores, el italiano Andrea Dovizioso (Honda) es de escasamente treinta puntos, frente a los sesenta del australiano respecto de Rossi.
Lorenzo, como el australiano, hizo la pole, salió el primero y, aunque algo más despacio que Stoner, acabó diciendo adiós a todos sus rivales.
Triunfo número 300
La victoria más laboriosa de la jornada fue la del español Héctor Faubel (Aprilia) en los 125 cc, pero tuvo sus connotaciones, ya que representó la número trescientos del motociclismo en España y eso después de que el de Lliria tuviese que emplearse a fondo hasta el último momento.
Faubel tuvo problemas con el motor de su Aprilia en las primeras vueltas, pero en lugar de rendirse aguantó el tipo y cuando vio que todo parecía estar nuevamente en su sitio tiró, cazó a los escapados y esperó su oportunidad, que acabó llegando al final de la carrera, espectacular como casi siempre, en la que cuatro pilotos se dedicaron a adelantarse por los huecos más insospechados.
El piloto español necesitaba la victoria para recuperar la moral después de todo el trabajo de evolución que está realizando en la moto del 2007, la denominada RSA de Aprilia, y acabó consiguiendo una victoria que le devuelve, una vez más, el liderato del mundial, la lástima fue que camino de esa victoria se quedó en la cuneta, por una caída, su compañero de equipo Sergio Gadea, quien hasta ese momento había luchado con ahínco por estar en el podio.