Dos análisis, un partido

Por ello me he fijado también en dos recientes entrevistas políticas que a mi juicio afinan sobre lo que le ocurre al principal partido de la derecha. La primera la hizo Carmen Merino a Pablo Matos en Canarias 7 y éste daba en la diana desde el punto de vista orgánico al repasar donde estaban los agujeros dentro de la geografía insular del PP: “en Lanzarote, donde existe una gestora desde hace tres años y por mucho esfuerzo que haga los que están al cargo de ellas, no cabe duda que una gestora no genera la misma ilusión que un comité democráticamente elegido. Pongo también como ejemplo Tenerife, donde hubo diferencias en los meses previos a las últimas elecciones autonómicas y locales y pongo también como ejemplo La Palma, donde el malestar se creo a raíz de cómo se gestionó la moción de censura en el Ayuntamiento de la capital. También ha habido problemas en la Isla de El Hierro y en Fuerteventura son evidentes”.

Desde Gran Canaria, fue el periodista Alejandro Zabaleta en La Provincia quien logró de José Miguel Bravo de Laguna otro agudo análisis de situación, esta vez ideológico, que también me parece certero: “Yo siempre abogué por un PP más centrado, más liberal, que coincide precisamente con el planteamiento que se quiere hacer ahora por parte de Mariano Rajoy. Yo me alegro de que el partido en su conjunto derive hacia las posturas que yo entiendo son las más razonables, en especial para una sociedad como la canaria, que es poco crispada, con una opción que defienda un programa liberal y moderado” y que a su ponderado juicio se acerca más a un Juan José Cardona o Javier Sánchez Simón antes que a José Manuel Soria. Así las cosas, normalidad orgánica y moderación ideológica serían las dos claves que debiera superar el PP en su próximo congreso autonómico tras el verano, según dos personas que lo conocen bien. Uno ya fue líder antes, otro puede serlo ahora. Aunque sólo será posible si entre todos o una mayoría, pasan página a eso que tan lúcidamente se ha bautizado como “un gran control, un largo monoteísmo” que caracterizó el periodo más reciente y numantino del PP en Canarias. Federico Utrera