Belén no vota PSOE

Aquí no hay discusiones políticas. Todos los partidos están de acuerdo en que no se puede permitir que unos jóvenes descerebrados maten a otro en una noche de juerga como si fuera parte de un ritual sanguinario y atávico.

Ni siquiera la ignorancia, el analfabetismo o la falta de educación de los asesinos les eximen de su nefando crimen. Todos nos alegramos de una sentencia justa como lo hacemos por el rescate de los 33 mineros chilenos.

En lo que sí hay diferencias de opinión es en asuntos políticos, como los silbidos a Zapatero, el resultado de las primarias en el PSOE, las diferencias evidentes entre PP y CC o las declaraciones de María Dolores de Cospedal.

La secretaria general del PP, cual pitonisa, dijo en Canarias que CC será castigada en las urnas por apoyar al PSOE en Madrid. No dijo nada si su PP será penado en Canarias por apoyar en las islas a CC. Según ella, CC no puede aprovecharse de su apoyo a Zapatero, pero el PP sí lo puede hacer con Paulino Rivero.

El PP no condena los silbidos de los ultras a Zapatero en un acto solemne, pero sus dirigentes pidieron actuar con mano dura cuando su jefe espiritual Aznar fue abucheado por jóvenes de izquierda. O sea, que el problema no es el abucheo, sino a quién se lo dedicas o quiénes son los que los profieren.

No hace mucho en una final de fútbol entre el Barcelona y el Bilbao buena parte del público silbó contra el himno nacional español y la bandera. El PP, como se recordará, se rasgó las vestiduras y puso el grito en el cielo.

Sin embargo, a ese mismo PP le parece normal y lógico, muy propio de una democracia con la libertad de expresión consagrada, que unos quinceañeros portando la bandera franquista del aguilucho piten al presidente del Gobierno cuando el rey está honrando la memoria de los soldados españoles muertos en combate.

Mientras la derecha española no se separe de los extremismos y no use la misma vara de medir para acontecimientos similares, jamás se ganará la confianza de los ciudadanos. Otra cosa es que gane unas elecciones por demérito del contrincante. Pero eso no significa nada: también gana batallas Belén Esteban en la televisión con sus imbecilidades y eso no la hace mejor que Carmen de Mairena.