Las papeletas de voto ''homologadas'' son el gran fraude de esta presunta democracia

c) Está comprobado que al menos el 90% de los votantes descarta rebuscar entre las papeletas de los colegios electorales y, por comodidad u otros motivos (limitaciones visuales, desconocimiento del proceso electoral, falta de cultura política o general, etc.) se limitan a escoger entre aquellas papeletas y sobres que les llegan a su casa en los días anteriores a las elecciones: es el llamado mailing electoral. El envío de papeletas a los domicilios es tan importante que incluso partidos tan conocidos como el PP, CC y PSOE perderían más de la mitad de sus votos si no procedieran a este envío. Por eso lo hacen pese a su alto coste.

d) Un mailing electoral exhaustivo implica (en el conjunto de las circunscripciones canarias) un gasto de no menos de 1 millón de euros (entre 150 y 200 millones de pesetas) ya que el gasto no es simplemente el de imprimir papeletas y sobres de diversos colores sino proceder al embuchado (meter papeletas en los sobres) que requiere un enorme número de personas al que hay que pagar por su trabajo, así como gestionar el envío de esta propaganda electoral a los centenares de miles de casas de los votantes.

e) Este gasto sólo pueden permitírselo los partidos con fuerte disponibilidad económica. En el de Canarias son sólo CC, PSOE, PP y NC, lo que les otorga una decisiva e inadmisible ventaja técnica respecto al resto de los partidos concurrentes.

2º QUÉ SERÍA LO DEMOCRÁTICO (Y LO QUE NO INTERESA A PP, PSOE NI CC)

a) Que una vez promulgadas las candidaturas por las respectivas Juntas Electorales, el Gobierno de Canarias, o en su caso la Delegación del Gobierno Central, asuma estatutariamente la obligación de enviar al domicilio de todos y cada uno de los votantes inscritos en el censo los sobres correspondientes a cada una de las

instituciones (Parlamento, Cabildo y Ayuntamiento) así como una papeleta de todos y cada uno de los partidos que se presentan a dichas instituciones.

b) Que se acepten como plenamente válidas las papeletas de voto que los partidos cuelguen en sus páginas web para ser recortadas por los ciudadanos, aunque sus bordes sean irregulares por haberse recortado “a tijera”, bastando que su tamaño sea similar a la del modelo oficial. Esto es, por cierto, lo que dice la ley: que las papeletas deben tener un tamaño aproximado de “x” centímetros. Las medidas dependen de las instituciones a votar ya que no es lo mismo el Parlamento de Canarias en el que el número de candidatos en las siete circunscripciones insulares es como mucho de quince que los grandes ayuntamientos y cabildos en los que se roza la treintena. En todo caso la ley no dice que el tamaño de las papeletas haya de ser exactamente el mismo pero así lo vienen interpretando las juntas electorales y, a falta de instrucciones de estas juntas electorales, los presidentes de las mesas electorales.

*De hecho, en 2004 en que encabecé una candidatura del “Partido La Gente” al Congreso de los Diputados, elevé escrito tanto a la Junta Electoral Central como a la Junta Electoral Provincial para que se aceptaran las papeletas recortadas de nuestra página web, papeletas que aún pueden verse en www.partidolagente.com porque aunque tras ese año dejamos la política mantuvimos la página como referencia para quienes en el futuro quisieran ver “de qué iba” nuestro “partidito”. Mi escrito tenía una fundamentación jurídica impecable pero la JEC contestó que no podía dictar resolución “por falta material de tiempo” (je, je); por su parte, el ya fallecido presidente de la JEP de Santa Cruz de Tenerife, don Roberto Roldán Verdejo, me dijo en una entrevista que en lo personal fue agradable por vínculos comunes que no vienen al caso que “no podía garantizar que los presidentes de las mesas fueran a aceptar dichas papeletas”. Salté, educadamente pero como un rayo: “Eso, don Roberto, es una excusa para no comprometerse. Si usted manda una circular a todas las juntas provinciales y locales ordenando que se acepten todas las papeletas que estén claras y que tengan unas medidas similares a las ”oficiales“, naturalmente que las tendrán que aceptar. Y, aunque de todos modos no voy a obtener representación, creará usted un precedente que le honrará porque será bueno para la limpieza democrática futura”. Don Roberto sonrió? pero no estaba por la labor.

Prosigo por donde iba.

c) “Que las papeletas a las distintas instituciones no tengan que ser forzosamente de un color determinado” sino que baste que conste el nombre de la institución y la relación de candidatos.

d) Que “se considere como voto válido cualquier trozo de papel común en el que se indique, mediante escritura manual, la institución y el partido al que se vota”.

e) Que igualmente se considere como válido cualquier sobre que especifique en su exterior, aunque sea manualmente, la institución a votar (Parlamento, Cabildo o Ayuntamiento).

3º EL CURIOSO CASO DEL “MOVIMIENTO PATRIOTICO CANARIO” (MPC)

a) Hay un partido que podría compensar en parte la actual tramposa situación gracias al respaldo que parece tener de un periódico de gran tirada como es El Día. Me refiero al MPC (Movimiento Patriótico Canario) que preside don José Luis Concepción.

b) Vaya por delante que no soy independentista como rotundamente expuse en el artículo de CANARIAS AHORA que aparece en este enlace http://www.canariasahora.es/opinion/2606/ . No obstante y como demócrata deseo que la voluntad popular se vea reflejada en las urnas sin trucos ni trampas.

c) Por ello sugiero a José Luis Concepción, presidente del MPC, que haga este sencillo experimento: gestionar con el director de El Día la distribución de las papeletas del partido conjuntamente con el periódico al menos durante la última semana de la campaña, de lunes a viernes, explicando a los ciudadanos que para votar sólo tienen que meter esas papeletas en cualquiera de los sobres al Parlamento que les llegarán a sus casas remitidos por los partidos “gordos”. Aclaro a los ciudadanos poco informados que los sobres de voto para cada institución son iguales y que lo único que diferencia el voto es la papeleta que los sobres llevan dentro. También, naturalmente, los ciudadanos pueden llevar las papeletas que reciban con el periódico a los colegios electorales y meterlas allí en uno de los sobres que tendrán a su disposición. O, si El Día se presta, podrían incluso incluirse los sobres en el interior del periódico.

d) El MPC tiene la relativa ventaja de que sólo se presenta al Parlamento por las islas de Tenerife y Lanzarote, con lo que el periódico sólo tiene que distribuirle papeletas para esa institución, por ejemplo media docena de papeletas en cada edición para que la gente pueda dárselas a sus parientes y amigos. En la distribución de Tenerife se incluirían las papeletas de Tenerife y en Lanzarote ?donde El Día también se distribuye- las de Lanzarote.

e) Acercando por esta vía las papeletas a los votantes, el MPC no sólo recibirá sufragios de los independentistas sino también votos despistados o de castigo a los partidos grandes. Sin acercarlas, no tendrá ni siquiera el voto independentista. Es lo que le ocurre al resto de partidos pequeños: que pierden mucho voto “propio” porque además de su inferioridad en vallas y en la comparecencia en las teles, al encima no recibir los ciudadanos en sus casas las papeletas ?de estos partidos pequeños- mucha gente intuye que no van a salir y se decantan por el llamado “voto útil”, que al final es el voto a los partidos financiados por los intereses de los plutócratas (banca, empresas energéticas, constructoras y otras empresas “gordas”, multinacionales, etc.) que nos han llevado adonde nos han llevado. Igualar la facilidad para votar a cada partido contribuiría más a la irrupción de nuevos partidos en las instituciones que cualquier otra reforma electoral, como la eliminación de las barreras o la redistribución de escaños por islas, esta última innecesaria porque si algo bueno tiene nuestra ley electoral es, a mi juicio, la actual triple paridad que sí debe mantenerse.

Emilio de Fez Marrero