Espacio de opinión de Canarias Ahora
Mi reflexión
Los grandes empresarios y sus políticos afines, vienen haciendo su campaña, que no debe ser la nuestra. Ellos van por el dinero fácil, sin importarle nuestro futuro, algo lógico, sin consideramos que el de ellos ya lo tienen bien planificado y bien dotado en otros destinos. Pero el nuestro, el de nuestras familias y el de nuestros descendientes, está aquí y otras posibilidades son impensables. Tenemos que cambiar el chip, no tenemos porqué aceptar todo lo que se les ocurra a los gobernantes, aunque el Pueblo los haya elegido, si no actúan congruentemente debemos hacerlo nosotros, nuestra Constitución permite nuestra acción directa, además de estar representados políticamente.
Los movimientos sociales y los grupos ecologistas estamos ganando terreno, pero no es suficiente, para triunfar necesitamos el apoyo de todas las personas sensibles e implicadas en facetas que tienen que ver directamente con nuestras luchas altruistas. Esta reflexión quiero trasladársela a colectivos que, por su actividad, tendrían que estar en primera fila de forma oficial, y sin embargo no lo están. ¿Si es por comodidad o pasotismo?, procede analizar la situación, ¿si es por ataduras tipo subvenciones oficiales?, es todavía menos aceptable. Las subvenciones las da el Pueblo con sus impuestos y los gobernantes no deben, ni pueden, arbitrarlas de acuerdo a afinidades políticas, ni en base a comportamientos controlados por ellos.
Hace menos de un mes, la prestigiosísima Comunidad Científica de Tenerife, nos convocó a una manifestación que finalmente resultó multitudinaria. La fundamentaron en la defensa de las especies, o sea, en la defensa de la vida, y en el cumplimiento de la Ley. Yo reenvié la convocatoria, como siempre, con unos comentarios personales, que redistribuí, mayormente, entre los colectivos a los que estoy más apegado, a los que doy por hecho que este tipo de llamamientos deben llegarles a la médula por la actividad que desarrollan, concretamente a las protectoras de animales y a los grupos de montaña. Y es que la defensa del Medio Ambiente nos toca de lleno, sin él no hay ni vida ni medio, esa Vida por la que luchan las protectoras, aunque muchas se circunscriban exclusivamente a perros y gatos, y ese Medio en el que desarrollamos nuestra actividad los grupos de montaña, que se supone deberíamos mimar sobremanera.
Pues bien, asumiendo que asistieron bastantes integrantes, la participación oficial, que es la que realmente deja clara cual nuestra defensa, fue muy pobre. Personalmente no vi sino una pancarta genérica de las protectoras de animales y, por más que busqué, ninguna de las federaciones ni de los grupos de montaña. Y yo me pregunto, ¿de verdad hemos evaluado, como debe ser, lo que supondría la actuación pretendida en el litoral de Granadilla a nuestras defensas y actividades? ¿Se es consciente del medio ambiente, de la vida y de los espacios naturales que destruiría? Y es que se cuantifican por millones los animales, de todo tipo, que morirían o se desarraigarían con esa innecesaria obra, obra que, por otro lado, no aportaría nada positivo a nuestra economía, sino todo lo contrario. Hay datos e informes técnicos sobrados al respecto, frente a simples manifestaciones con soterrados fines especuladores de sus promotores.
¿De que han valido las conferencias que extraordinarios expertos, llámense Wolfredo Wildpret, Federico Aguilera, Alberto Brito, Jacinto Barquín, Rubén Barone, etc., nos han impartido en nuestras propias sedes o en otros lugares a los que nos han invitado? ¿Como es posible que la Federación Tinerfeña de Montañismo o mi grupo, el Club Montañeros de Nivaria, que me designaron y representé durante cuatro años en el Patronato de Espacios Naturales Protegidos de la Isla de Tenerife, no hayan, por lo menos, puesto a disposición sus pancartas de los montañeros interesados, cuando ambos recogen en sus Estatutos la defensa del Medio Ambiente? ¿Es mínimamente aceptable que se me diga que han decidido no sacar la pancarta porque algún socio está a favor del puerto de Granadilla, cuando habían decenas de ellos interesados en ir bajo ella? ¿Lograremos con estas actitudes preservar el Medio y la Vida que tanto defendemos o debiéramos defender, o tratamos de que otros lo hagan por nosotros, simplemente por comodidad o por quedar bien en la foto?
La verdad, sí tengo que decir que en estos momentos me siento decepcionado, pero seguiré luchando y no haré, en principio, lo que me pedía el cuerpo, darme de baja de un Club al que he dedicado parte de mi vida y no sólo por la defensa del Medio, como muchos saben. Seguiré ahí, porque algunos justo lo que pretenden es que yo, y muchos como yo, tiremos la toalla y les dejemos el camino expedito. Proseguiré pidiendo colaboración a mis compañeros y una mayor implicación en cosas tan importantes que nos tocan muy de cerca. Por supuesto, jamás me arrepentiré de haberle dedicado esos cuatro años de mi vida, al Patronato de Espacios Naturales Protegidos de Tenerife, entre otras cosas, porque tuve la gran oportunidad de estar, codo a codo y defendiendo los mismos valores, junto a una persona a la que especialmente admiro, don Wolfredo Wildpret.
Cándido Quintana
Sobre este blog
Espacio de opinión de Canarias Ahora
0