Acatamos respetuosamente, como no podía ser menos, la sentencia que nos fue notificada este lunes en la que un juez de Primera Instancia, Tomás González, nos condena a pagarle a la empresa editora de Canarias7, Inforcasa, 5.500 euros por intromisión ilegítima en el derecho al honor. Acatar este fallo no significa que lo compartamos, por lo que ya hemos encargado a nuestros abogados que recurran la sentencia ante la Audiencia Provincial de Las Palmas porque en nuestra opinión es injusta. El juez González nos condena por comentarios de nuestros lectores, un total de catorce, a los que añade otros cuatro en absoluto ofensivos publicados en esta misma sección, seguramente con el fin de no limitar al foro de opiniones anónimas la desproporción del fallo. Porque hubiera sido absolutamente extravagante y jurídicamente débil limitar nuestra responsabilidad exclusivamente a lo dicho por lectores en un caso de una amplia conmoción social como fue la renovación de órganos directivos de La Caja y el papel socialmente presionante y políticamente condicionante del periódico que dirige Juan Francisco García González, director general de esa entidad durante 22 años.