Le ha cogido el gusto el presidente Román Rodríguez a la intermediación, la negociación y la conversa. En Marruecos no paró de hablar, como ha quedado dicho y acreditado, y parece que el hombre no piensa perder la hebra de aquí a que llegue Adán o el que elija la peña. Ahora la ha cogido con la UD Las Palmas, para la que ya estuvo haciendo gestiones en su momento con un éxito más bien relativo, quizá porque algunos de los encargos los situó en la vía plateada y allí se hace bueno lo del mucho jabla-jabla y poco jase-jase. (Traducción: mucho hablar y poco realizar, o que le pregunten a Félix Santiago). Total que, como la situación se complica y muchos empiezan a temer incluso que el Universidad les eche la pata por delante, el presidente ha convocado para este viernes a Luis González y a un grupo de empresarios a un almuerzo en su residencia oficial. A ver qué sale de ahí.