Un año después de que Cabo Verde S.A. presentara esta solicitud de modo alocado y sin fundamento, el Gobierno vino a requerirle para que subsanara las deficiencias detectadas, y todo gracias a un revelador informe del Instituto Tecnológico Minero, que las ponía de manifiesto. No consta que la empresa solicitante subsanara nada de lo requerido entre 1990 y 1993. Llegaron los socialistas, que en 1993, atendiendo a la caducidad reconocida incluso por Cabo Verde, la declaró formalmente, luego tenemos la impresión de que muy poco clavo va a ser éste para asirse a él, por muy desesperado que esté el señor Soria. Y tiene motivos para la desesperación, porque otro consejero del PP, Francisco de la Barreda, habrá de explicar por qué el Gobierno del que formaba parte no recurrió una sentencia de 1998 que daba la razón a la empresa en su intento por tener aquella autorización para explotar la cantera de Tebeto.