Aprovechamos que ha saltado a la pizarra la consejera de Educación para comentar una noticia que se nos había pasado por alto, la del archivo por parte de la Fiscalía de las actuaciones que había iniciado tras una denuncia de la Sociedad Española de Ornitología (SEO/Birhlife) por haber autorizado en 2006, siendo viceconsejera de Medio Ambiente, la captura de tres parejas de halcones tagarotes sin las más mínimas garantías. La Fiscalía no aprecia indicios de delito, es decir, causa penal, lo que no significa que no puedan existir responsabilidades administrativas o políticas, que son las que realmente podemos exigir los ciudadanos de a pie. Y esas se las seguimos exigiendo porque las triquiñuelas a las que se han asido para autorizar a unos amigotes dentistas la captura de esas especies protegidas no son en absoluto presentables.