Como contamos aquí en su día, fue José Manuel Soria y no Larry Álvarez quien ofreció a Teresa Cruz la plaza de jefa de Informativos de la futura radio pública canaria, una decisión que también contribuyó a agudizar la crisis interna en el PP. Muchas voces con sordina consideran que esta cuarta colocación laboral de Cruz perjudica notablemente la imagen del partido. El mismísimo Larry Álvarez ha llegado a reconocer en público y en privado que esas no fueron maneras, que se equivocaron. Pero la elección de Teresa Cruz para la radio se produjo después de que otros dos periodistas declinaran el ofrecimiento, huyendo como gatos escaldados de un modo de hacer política y comunicación que fue rentable en su día para el PP, pero que ahora lo contamina todo de modo perverso.