Pero si Arnáiz tendrá que responder de desobediencia y desacato, así como del quebranto producido al erario público por la Gran Machangada, no se olviden ustedes del jurado que otorgó los premios del concurso. Por si no se han leído el dictamen del Consejo de Estado, en él se recuerda que con fecha 17 de enero los miembros de ese jurado recibieron un escrito formal del Ministerio de Fomento avisándoles de la ilegalidad del concurso que se disponían a fallar y advirtiéndoles del berenjenal en que se metían. Ellos siguieron adelante. Tal jurado estuvo compuesto, además de la alcaldesa Pepa Luzardo, por Felipe Afonso, concejal de Planeamiento y Gestión Urbanística; José Manuel Soria, presidente del Cabildo de Gran Canaria; José Setién, arquitecto y coordinador general del área de Urbanismo del Ayuntamiento capitalino; y Pedro Pablo Monzón, arquitecto y director técnico del Cabildo. En calidad de secretaria actuó Ana Castillo, miembro de la Asesoría Jurídica de la Autoridad Portuaria. Conocedores de la ilegalidad y funcionarios o cargos públicos todos ellos, podrían ser acusados también de desacato, además de caerles el peso de la ley por no denunciar lo que sabían.