¿De verdad se imagina alguien a un gobierno del PP con el PSOE apoyando medidas como la reforma laboral, el copago de medicamentos para los pensionistas, la criminalización de los inmigrantes, la subida de tasas universitarias o el reinado de Repsol frente a Lanzarote y Fuerteventura? Pue sí, los hay, y los hay aunque de maner minoritaria dentro del PSOE, el partido que recurrirá algunas de esas medidas ante el Tribunal Constitucional y/o las derogará cuando regrese al Gobierno, como proclamó este domingo en El País Pérez Rubalcaba. Pero aquí seguirán presionando con la ayuda de algunos medios de comunicación, unos por convicción y otros por absoluta venganza. Si el PSOE quisiera su desaparición a la vuelta de tres años, solo tiene que atender los cantos de sirena, porque si hay votantes que siguen sin comprender que pacte con Coalición Canaria, un revolcón con el PP sería imperdonable por generaciones.