El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Luego vinieron problemas de cabida
Con la concesión en la mano, los P-15 descubren que el proyecto original se les había quedado pequeño, que era preciso solicitar un aumento de parcela. Pero corrían malos tiempos para la lírica, con un Luis Hernández atando el petate y CC en debilitada posición. Esperando tiempos mejores, los promotores se encuentran con la reaparición estelar de Arnáiz, que es promovido por las fuerzas vivas portuarias a ocupar la presidencia del puerto, una oportunidad única para él de pasar factura a los que le quitaron de en medio por conflictivo. Así que, aprovcechándose de que pretendían más metros y la cosa presentaba dificultades ante otras instituciones como el Ayuntamiento, que debía otorgar licencia, Arnáiz pone como condición la entrada en la sociedad de sus mentores. Es entonces cuando el proyecto coge buen rumbo y una adecuada velocidad de crucero. Había que volver a soltar lastre, pero ahora era el presidente portuario quien decidía quién entraba y quién salía de la sociedad, del lado de Sotavento.
Sobre este blog
El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora