Sitúense en aquellos días de 2003, con Chavanel como testigo y cómplice -al menos durante esos últimos seis meses- de las trapisondas que él mismo describe con todo lujo de detalles en este artículo que guardamos en nuestros archivos y que todos los oyentes de CANARIAS AHORA RADIO pudieron escuchar el 2 de noviembre de 2004. Observen cómo describe su divorcio del que ahora ha vuelto a ser su icono: “Dios le había llamado [a Juan Francisco García]. Volvía a enamorarse de José Carlos Mauricio.Y como estaba allí y lo presencié todo, lo demás se explica solo. Pasaron seis meses hasta que nuestro desencuentro se materializó. No un día ni dos. Seis meses. Como yo era el principal asesor del señor García González, y disponía de una información privilegiada de todo lo que ocurría, el diagnóstico empezó a ser evidente para mí desde mucho tiempo antes al desenlace”. Conocedor y poseedor de “una información privilegiada de todo lo que ocurría”. Vaya, vaya con el periodista que ahora imparte lecciones de decencia.