No rehúye debate alguno el obispo de Canarias, Francisco Cases, que como anunció que haría, se sentó este miércoles entre el público para escuchar lo que un grupo de periodistas iba a opinar sobre la visión de los medios de comunicación sobre la Iglesia. Fue en un debate organizado en la Casa de la Iglesia con motivo del día del patrono de la profesión. Cases escuchó con atención lo que se decía y anotó todo en una libreta grande, con letra pulcra y metodología de persona ordenada. Esperó al final y se mojó. Compartió con el periodista más crítico casi todo lo dicho, empezando por la adjudicación a la Iglesia del “follón” montado en torno a cuestiones como el aborto, los límites de la ciencia, la familia y los peligros que corre la democracia. Y discrepó en las zonas de privilegio que tiene la Iglesia. “Le ahorramos al Estado 3.250 millones de euros a cambio de los 150 que nos da”. Y lo justificó en las plazas de colegios concertadas, más económicas que la escuela pública, en su versión.