Los socialistas canarios tienen carta blanca para arremeter contra los presupuestos del Gobierno de Canarias, lo que demuestra que no hay imposiciones de Madrid para limar asperezas con Coalición Canaria. Muy al contrario, el Grupo Parlamentario socialista sostiene que cualquier respaldo al proyecto podría ser interpretado por los ciudadanos como una bendición a unos presupuestos que no están diseñados para salir de la crisis, sino para verla desde la barrera, reduciendo los gastos sociales y la inversión, como ha sucedido en los tres últimos años. Además, saben que no oponerse equivale de inmediato a que portavoces nacionalistas como Barragán se jacten de que ese sería el pago por el apoyo de Ana Oramas y Perestelo a las cuentas de la ministra Salgado.