No ha habido la misma reacción ciudadana, ni mediática o política por la muerte de Octavio Santos que cuando falleció también violentamente Iván Robaina. Qué se le va a hacer. A lo sumo dos manifestaciones que nacieron bichadas por el empeño de algunos de atajar violencia con más violencia. Ni habrá funeral en la Catedral porque nadie lo ha solicitado así. Los padres del muchacho fallecido la madrugada de la Navidad en el polígono de la Vega de San José han pedido al párroco del barrio, Jorge Hernández, una misa sencilla en la parroquia de la Virgen de la Vega. Y así la tendrán. Será este viernes, a las 19.30, en el mismo polígono donde Octavio se crió y donde encontró la muerte.