Mazotti exige la retirada de los actuales administradores concursales
La Plataforma de empleados pro-salvación Mazotti pidió este viernes la retirada de los actuales administradores concursales nombrados por el Juzgado para nombrar unos nuevos “con interés, con ganas de sacar adelante esta empresa”, según destacó el portavoz de la plataforma, Antonio García.
Para ello, los trabajadores realizaron este viernes una manifestación que partió de la sede de la empresa en la capital grancanaria en dirección al Juzgado Número 1 de lo Mercantil, donde entregaron más de un centenar de firmas apoyando la demanda de separación de los actuales administradores concursales que la empresa ha solicitado al juez.
Según García, el proceso concursal solicitado voluntariamente por la empresa “no se está llevando a cabo de forma efectiva”. El objetivo de acogerse al concurso voluntario de acreedores o suspensión de pagos era que la Ley articulase “medidas de protección para todos los que se viesen afectados por esta situación”. “Sin embargo, estamos viendo que los mecanismos que articula la Ley, precisamente para favorecer la reactivación de la actividad empresarial y conseguir además aumentar la tesorería de la empresa para poder establecer un convenio satisfactorio con todos los acreedores afectados, no se está llevando a cabo de forma efectiva”, insistió.
Actualmente, la plantilla de Mazotti está formada por apenas 90 trabajadores, de los 230 que eran en el mes de julio de 2007, cuando se sometió al proceso concursal justo un mes después de la detención de su presidente, Alejandro Navarro, por su implicación en el caso Faycán.
Tras su detención, explicó el otro portavoz de la Plataforma, José Miguel Armas, los bancos “pierden la confianza en la empresa”. En este sentido, recordó que Mazotti es una empresa que su principal cliente son las administraciones que, como no tienen siempre liquidez, es Mazotti la que hace frente a los pagos de las obras de forma previa recurriendo a la financiación bancaria. Por eso, tras la detención y la pérdida de confianza de los bancos, Mazotti entró en suspensión de pagos y solicitó la declaración de concurso voluntario.
Ello está implicando la rescisión de contratos, lo que “significa la muerte directa de Mazotti”. Por eso, los trabajadores están realizando visitas a los representantes públicos “para que nos ayuden e intenten paralizar estos procesos de rescisión contractual que significaría la muerte de Mazotti y, con nosotros, de más de 800 pequeñas y medianas empresas del tejido productivo canario”.
Así, se han reunido ya con representantes del Cabildo de Tenerife y del Cabildo de Gran Canaria, mientras que están a la espera de reunirse con el presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero. Hasta el momento, todo han sido “buenas palabras e intenciones, pero no resultados” ni “interés para paralizar la expulsión de la empresa de las obras públicas”.
En cuanto a Navarro, para los trabajadores es el presidente que “nos contrató a nosotros y el que inició esta empresa”. Además, dijo Armas, “es el que nos está dando el apoyo a nosotros con la cesión de una parte de la empresa a los trabajadores, que él mismo ha reconocido que son los que han conseguido que esta empresa llegara a ser puntera en Canarias en construcción”.
Navarro ha traspasado el 80% de sus acciones a un grupo representativo de trabajadores, una decisión que “acogemos con serenidad, pero con mucha responsabilidad y las mismas ganas con las que hemos estado trabajando siempre”, apostilló García.