La XI Feria Regional del Vino, Queso y Miel de Canarias regresa tras cuatro años de parón

La XI Feria Regional del Vino, Queso y Miel de Canarias, que se celebrará el próximo fin de semana, días 6 y 7 de mayo, en San Fernando de Maspalomas, en el municipio de San Bartolomé de Tirajana, ha sido presentada este miércoles por el presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales. Un evento que regresa cuatro años después de que, en 2019, Valsequillo acogiera la última edición que vuelve para difundir y potenciar el consumo de productos elaborados en las zonas rurales del Archipiélago canario.

La Corporación informa en una nota de prensa que la Feria tendrá lugar en una superficie de 800 metros cuadrados del aparcamiento del Estadio Municipal de Maspalomas, en donde se reunirán productores y productoras de todo el Archipiélago, distribuidos en 25 stands, junto a otros cinco institucionales, uno por cada municipio de la Mancomunidad: San Bartolomé de Tirajana, Tejeda, Valsequillo, Vega de San Mateo y Villa de Santa Brígida.

Estará abierta al público el sábado, día 6, desde las 11.00 hasta las 20.00 horas, y el domingo, día 7, también abrirá a las 11.00 horas para cerrar a las 16.30 horas.

Morales afirmó que para el Cabildo “es una prioridad mostrar, incentivar, potenciar y promocionar el producto local y su consumo. De ahí la importancia de esta Feria y nuestra colaboración en ella”.

Hizo hincapié en que el desarrollo de la agricultura y la ganadería de la Isla “supone una apuesta de sostenibilidad de nuestros campos, de nuestros paisajes y de los pueblos de Medianías, que, de esta forma, se reactivan y dinamizan”. Así, reafirmó el “compromiso absoluto” del Cabildo con la continuidad y el crecimiento del sector primario grancanario, que calificó como estratégico para la economía y la supervivencia, “y sabemos que este apoyo está dando sus frutos e incentivando a las y a los agricultores, ganaderos, viticultores y apicultores”, sostuvo.

Del mismo modo, subrayó la relevancia de esta iniciativa, que consideró una herramienta idónea para dinamizar la economía rural y mantener las actividades empresariales ligadas al sector primario, al constituirse en un intercambio entre las islas, que también contribuye a mejorar el conocimiento, a compartir experiencias y a mostrar al mundo unos productos singulares.

“Gracias a estas acciones de dinamización del sector agropecuario, se logra movilizar y consolidar la economía en los municipios donde se desarrolla, en comarcas muy castigadas por la despoblación y la falta de actividad económica”, aseguró. Igualmente, destacó la gran acogida que ha tenido este evento en todas sus ediciones, que se va superando en cada edición tanto en público como en ventas, lo que, a su juicio, es un “aval de la calidad de los productos expuestos, que tienen detrás un mundo de valores representan los avances de las producciones artesanas transformadas por el sector primario en las Islas”.

A este respecto, incidió en que esa calidad y originalidad de los productos de kilómetro cero supera los índices que marcan los estándares del comercio alimentario y motivan que los contratos de negocio que se cierran con empresas de restauración y de delicatessen durante la celebración de esta Feria incentiven su comercialización, se conviertan en el verdadero sostén de estas actividades del sector primario y supongan, además, un atractivo más para el turismo.

“Este año será el del reencuentro y el de la demostración palpable de que, en estos cuatro años, ha aumentado considerablemente la comercialización, la producción y la presencia del sector primario, a pesar de los duros momentos que estamos viviendo y de la crisis del sector ganadero, que cuenta también con el apoyo decidido del Cabildo de Gran Canaria”, concluyó el presidente Morales.