Los 'camisas rojas' rompen el cordón policial e irrumpen en la estación de comunicaciones
KADLUMKAEW (TAILANDIA), 9 (Reuters/EP)
Los 'camisas rojas', partidarios del ex primer ministro Thaksin Shinawatra, han roto el cordón policial y han irrumpido este viernes en la estación terrestre de comunicaciones para solicitar a las autoridades a que acaben con la censura de una cadena de televisión opositora, en el tercer día del decretado estado de excepción en la capital, Bangkok.
Las fuerzas de seguridad tailandesas lanzaron gases lacrimógenos para dispersar a cientos de manifestantes que escalaron la valla de alambre y forzaron la puerta del complejo, desobedeciendo el decreto de estado de excepción.
La mayoría de los soldados se retiraron del complejo de la estación de comunicación y dejaron el terreno bajo el control de los 'camisas rojas', afines a Shinawatra, que fue derrocado por un golpe militar en 2006, y que con estas protestas presionan al Gobierno para que se celebren nuevas elecciones.
Los manifestantes no han entrado en el principal edificio del recinto en el que la señal satélite ascendente permite emitir el canal People Channel partidario de los 'camisas rojas'. Ayer jueves, las autoridades accedieron a la estación, se hicieron con el equipo y cortaron la emisión, lo que provocó nuevas concentraciones de los opositores.
“Queremos que vuelva nuestra cadena de televisión. No podéis cerrar nuestros ojos y nuestros oídos”, indicó uno de los líderes opositores, Jatuporn Prompan, desde la parte trasera de un camión antes de encabezar las protestas dentro del recinto.
Los 'camisas rojas', que consiguieron entrar el miércoles en el Parlamento rompiendo también el cordón policial, llegaron a la estación terrestre de satélites Thaicom Pcl, en la provincia de Pathum Thani, al norte de Bangkok. La estación se ha convertido en escenario de protestas desde que ayer el Gobierno cerrase el canal como parte del estado de excepción declarado por el primer ministro, Abhisit Vejjajiva.
SIETE MEDIDAS
El portavoz del Ejército, Sansern Kaewkamnerd, había amenazado con mantener el orden “en consonancia con la ley” utilizando medios “desde suaves hasta duros, tomando siete medidas si los manifestantes lo violan (el decreto)”.
Entre estas siete medidas se incluyen el uso de cargas con porras y protectores, mangueras de agua, gases lacrimógenos y balas de goma. Alrededor de unos 30.000 agentes de seguridad fueron desplegados a lo largo de Bangkok, añadió el portavoz.
Las fuerzas de seguridad no están visiblemente desplegadas en el lugar de la concentración, que se encuentra justo enfrente de la sede policial. En un intento aparente de evitar la provocación, los agentes han optando por permanecer en su base o en las carreteras a al menos a dos kilómetros de la estación.
El primer ministro tailandés, Abhisit Vejjajiva, en declaraciones previas a los últimos incidentes, había asegurado que no podría ordenar una ofensiva contra los manifestantes, de mayoría rural y de clase obrera, que han ignorado también la orden impuesta desde el sábado de abandonar el principal distrito comercial de Bangkok.